Tu escaparate de espejos dorados.

En DoradoDecora podrás encontrar la mejor y más cuidada selección de espejos dorados o con acabados en dorado. Si estás buscando el espejo dorado ideal para tu hogar, en nuestro catálogo podrás encontrarlo. Porque sabemos que en dorado todo queda mejor, hemos querido reunir para ti, y en un solo lugar, los espejos dorados más deseados y de los estilos decorativos más variados. No esperes a que te lo cuenten, adéntrate para descubrirlos.

¿Qué te interesa? ◌ Recomendados ◌ Redondos ◌ Tipo Sol ◌ Vintage ◌ Antiguos ◌ Grandes ◌ Rectangulares ◌ Modernos ◌ De Pie ◌ Conjuntos ◌ Asequibles

*Los precios son orientativos y puede estar sujetos cambios. Los colores pueden variar ligeramente respecto el color original. Los enlaces son pagados y redirigen a la tienda de Amazon.es.

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Espejos dorados, el dorado y los espejos.

El dorado es un color indiscutiblemente vinculado a la historia del espejo desde hace mucho tiempo. Su relación es tan sumamente estrecha e íntima que resulta algo habitual, que al pensar en un espejo de forma genérica, una de las primeras imágenes que se nos vienen a la cabeza es la de un espejo envuelto en un pesado marco de un dorado vintage, con cierta patina de nobleza, y de un estilo más bien rococó o afrancesado, con sofisticados y pomposos ornamentos.

Pero lejos de ser una relación artificial perpetrada por el glamour de los escenarios hollywoodienses o producto del mero azar, el surgir de este enlace, como todo acontecimiento tiene su historia, y ésta se remonta hasta la que podemos denominar como época esplendorosa del espejo, en el momento histórico en el que por fin se comienza a fabricar en vidrio espejado (vidrio recubierto por uno de sus lados de una mezcla de estaño y mercurio), consolidándose así el espejo moderno, allá por al siglo XV en Centroeuropa y en torno al siglo XVI en Venecia, dando como resultado espejos mucho más nítidos y reflectante que los que se lograban anteriormente con otros materiales.

Los primeros espejos dorados.

Sin embargo estos nuevos espejos traerían asociado un problema, y es que eran muy costosos, tanto en términos de producción como de precio de venta, lo que a su vez sirvió como escusa para que se creara el indivisible vinculo con el dorado que llega hasta nuestros días. La lógica tras esto era que un objeto de tal valor e importancia debería ir enmarcado en algo de al menos igual valor, y fue así como los espejos comenzaron a enmarcarse en trabajadas y costosas piezas de artesanía (de yeso y madera) en las que, además de piedras preciosas engarzadas, por sobre todo; predominaba el oro y el pan de oro en sus acabados, haciendo, ya para siempre, que desde entonces el dorado sea el color por antonomasia del espejo.

El resurgir del espejo dorado.

Aunque los espejos en dorado siempre han sido objetos decorativos de por sí atemporales y muy apreciados a la hora de engalanar espacios, siempre ocupando un lugar destacado en la decoración de interiores, en la actualidad su utilización ha visto un sorprendente y fresco renacer, en parte, debido a la variedad de formas y diversidad de acabados y materiales que la fabricación presente nos permite, lo que a su vez facilita su generalización, al ser posible adaptarlos a todos los gustos y diseños estilísticos imaginables, y en parte; a esas misteriosas leyes de la moda y las tendencias que nunca acaban de quedar completamente definidas. Pero sea como sea, lo cierto es que hoy los espejos dorados están es todas partes, los vemos recomendados en las mejores revistas de decoración, en las cuentas de los influencer de diseño en Instagram o Pinterest más destacados, o llenando los catálogos de las tiendas más reconocidas como IKEA, Zara Home, Maison Du Mondo o El Corte Ingles. Lo que unido a la gran acogida que parecen haber tenido por parte de la gente, nos indica que no se espera que esta tendencia vaya a desaparecer pronto, al menos en unos cuantos años.

Espejos dorados en tendencia.

Como decíamos anteriormente los espejos dorados son un elemento atemporal en el diseño de interiores, sin embargo las nuevas tendencias han impuesto unos formas y acabados particulares de nuestro tiempo que no se pueden desatender si lo que pretendemos es que nuestro hogar esté a la última. Dicho esto, es conveniente no olvidar que la mejor elección es siempre la que mejor se adapte a nuestro gusto personal, al estilo de nuestro hogar y con la que más cómodo o cómoda nos sintamos, por lo que es aconsejable que cualquier nueva tendencia que se pretenda adoptar, se adapte a ti y a tu hogar antes que tu a ella. Sin más, espejito, espejito, dime ¿Cuáles son los espejos dorados más trends en la actualidad?

Espejos redondos dorados:

Los espejos redondos de marco dorado sencillo, indistintamente en acabados o versiones más o menos brillantes, se han vuelto una de las piezas más buscadas del momento. Su versatilidad a la hora de encontrarles un espacio adecuado, su fina elegancia, sus líneas suaves, su estilo delicado y limpio, unido a sus más que moderados precios, han sido argumentos suficientes como para que todo el mundo haya claudicado a favor de este tipo de espejos. A los que además, debemos añadir, los espejos redondos con cuerda o cadena para ser colgados, una versión un tanto más joven y desenfadada, que sin embargo, nos encanta.

Espejos sol dorados:

Otra interesante tendencia es la de los espejos sol dorados que imitan en su marco los rayos emanando del astro sol. Aunque en realidad éstos espejos tienen varios cientos de años, el resurgir de hoy en día está más asociado al modernismo francés de mediados del siglo pasado, por lo que aún pudiéndose encontrar de todo bajo esta tendencia, lo habitual es toparnos con espejos de metal dorado con ángulos más rectos en detrimento de piezas de aspecto más labrado. Estos espejos presentan varias características que los hacen muy interesantes desde un punto de vista decorativo. Son espejos que visten las paredes de forma asombrosa, tienen mucha presencia y son bastante llamativos y fáciles de combinar, todo esto sin mencionar que quedan realmente bien allí donde los pongas.

Espejos dorados vintage:

Sin duda una de las mayores tendencia en decoración, ya no sólo en lo que a espejos se refiere, es la de los espejos dorados antiguo, o cuando menos; de aspecto antiguo, piezas copiosamente ornamentados con motivos vegetales y escultóricos al más puro estilo barroco o rococó, con cierto aire afrancesado, y por lo visto; cuanto más grandes mejor. Es tal la fiebre que han despertado estas piezas en el interiorismo que se pueden ver incluidas en todo tipo de estilos y en casi cualquier combinación de colores y estancias de la casa, incluso en los baños. Y no es para menos, su elegancia y belleza junto a su capacidad para soportar toda la carga de la decoración hacen de ellos la apuesta perfecta.

Espejos modernos dorados:

Entre los espejos dorados más deseados se encuentran los de estilo más actual, que incluye tanto aquellos de líneas sinuosas, ovaladas, asimétricas, orgánicas y un tanto irregulares, como todos aquellos de líneas de corte más geométrico, como pueden ser los espejos hexagonales. El gran aporte de este tipo de espejos a la decoración, además de contribuir con un toque de contemporaneidad, viene dado por su originalidad, lo que facilita en gran medida la creación de espacios más personales y adaptados a las necesidades y gustos de cada una.

Espejos dorados grandes:

Una de las ultimas tendencias en irrumpir en el mundo de los espejos es la de los grandes espejos, piezas de gran porte y con dimensiones más que generosas. Si bien casi cualquiera de los espejos que hemos enumerado hasta ahora podría englobarse bajo esta tendencia, cave destacar al menos un tipo distintivo, los espejos de pie, y a poder ser; con su arco superior redondeado (arqueados). Una elección muy adecuada si lo que se pretende es trasformar espacio de manera radical y al instantánea.

Espejos ventana dorados (espejos cuarterones):

Por último, es necesario mencionar el resurgir de las espejos cuarteados o panelados que simulan las vidrieras de una ventana. Estos espejos, que podemos encontrar desde tamaños medios a grandes y en formas cuadradas y rectangulares, solían ubicarse frente a ventanas para reflejar las vistas y ofrecer una mayor sensación de espacio, pero hoy en día, seguramente favorecidos por su gran capacidad decorativa y su estética fácil y ordenada, podemos verlos invadiendo todas las zonas de la casa, desde pasillos y salones, hasta haciendo de cabecero de cama en los dormitorios. Todo lo cual nos parece una idea fantástica.

Espejos, más que estética.

Todas sabemos de la gran capacidad que poseen los espejos para engalanar espacios con su presencia. No es ningún secreto que un hermoso espejo, cuidadosamente elegido, es una de las mejores maneras de completar la ornamentación estética de cualquier estancia. Pero más allá de esta única cualidad decorativa, digamos meramente estética o puramente estilística, y claro está, sin contra con la de poder admirarnos frente a ellos antes de salir de casa cada mañana, los espejos aportan a la decoración dos grandes propiedades funcionales de las que nos podemos aprovechar a nada que contemos con ellas y las conozcamos un poco. Son las siguientes.

Luminosidad:

Una de las propiedades decorativas de los espejos es la de introducir luminosidad en los espacios sombríos. Cuando una estancia carece de ventanas y sus fuentes de luz son únicamente artificiales o cuando las ventanas no aportan la necesaria luz, ya sea por el tamaño de éstas o porque el cuarto es muy amplio, una forma muy adecuada de solucionarlo es añadiendo espejos estratégicamente situados con ánimo de atrapar y reflectar la mayor proporción de luz posible.

Consejos para ganar en luminosidad:

Coloca los espejos cerca de fuentes de luz y con el ángulo o inclinación adecuada para captar la máxima luz posible.

Amplitud:

La otra propiedad a destacar es la de la sensación de amplitud visual que puede traer la colocación de espejos en los lugares adecuados. Si en nuestro hogar hay espacios angostos o no muy grandes en los que se respira una sensación de estrechez, como puede ser el recibidor, una pequeña salita o un dormitorio algo recargado de muebles, la utilización de espejos, y aquí no hay truco; cuanto más grandes mejor, aportará una sensación de volumen y amplitud a la estancia sin igual, lo que a su vez ayudará a crear una atmosfera mucho más agradable.

Consejos para jugar con la amplitud:

Valiéndonos de la forma y la orientación de los espejos podemos destacar diferentes dimensiones en un espacio. Para amplificar la sensación de altura de una estancia, utiliza espejos de pie o de pared estrechos y altos. Si lo que necesitas es disminuir la sensación de profundidad, usa espejos rectangulares y largos, y para intensificar la ilusión visual de volumen, emplea un par de espejos enfrentados en paredes opuestas.

Algunas ideas para una decoración actual con espejos dorados.

Ya sea que quieres colocar un nuevo espejo en tu hogar o que estés buscando formas diferentes de poner o distribuir alguno que ya tienes, aquí te dejamos algunas ideas muy de actualidad para que te inspires a la hora de decorar con espejos. Con ellas pretendemos que puedas sacarle todo el partido a tus espejos y que tu hogar se vea de la mejor forma posible.

Juego de espejos:

Una de las formas más resultonas de colocar espejos es creando conjuntos o sets de espejos. Para ello, prueba a combinar en una pared espejos de diferente tamaño y estilo y en diferentes alturas, todos en torno a un punto central, para conseguir un claro efecto de composición.

Espejos y plantas:

Si lo tuyo es es sentirte inmersa en la naturaleza y disfrutar de una sensación de acogedora frondosidad en el interior de tu casa, prueba a situar plantas cerca e incluso delante de espejos. Esto se puede lograr de dos maneras diferentes, o bien bajando los espejos al nivel de las platas (no tengas miedo a descolgar los espejos, cada vez es más habitual), o bien; subiendo las platas al nivel de los espejos, por ejemplo; colgándolas o valiéndote de soportes para macetas.

Espejos apilados:

Otra forma de lograr una hermosa composición, pero esta vez al nivel del suelo, es alineando un conjunto de dos o tres espejos de tamaño medio apoyados en la pared y sobre el suelo, y a poder ser de estilos diferentes, mientras se solapan partes de sus marcos. Con ello lograras que tu hogar transmita un aspecto desenfadado y casual.

Espejos de pie en las esquinas:

Si bien, lo habitual y adecuado es colocar los espejos sobre una pared, en caso de tratar con espejos de pie altos no siempre tiene por qué ser así. De hecho resulta cada vez más común encontrarnos este tipo de espejos desplazados a las esquinas de las estancias aprovechando los espacios que de otra forma quedarían muertos o en todo caso, menos mimados por la decoración. Esta configuración además de diferente y práctica es muy propicia para acentuar la sensación de amplitud del espacio.

Errores a evitar en la decoración con espejos.

Es cierto que los espejos son elementos ineludibles de la decoración y que lo que aportan con su presencia y lo que hacen por las estancias, difícilmente es igualable por otro tipo de mobiliario. Sin embargo el uso de espejos de forma decorativa exige cierta atención, no todo vale en el empleo decorativo de espejos cuando de lo que se trata es de sacar el máximo partido en la apariencia y funcionalidad de nuestra hogar. Así algunas configuraciones no muy pensadas o simplemente malas elecciones pueden jugar en nuestra contra dándonos como resultado algo contrario a lo buscado. Pero todo esto no debe disuadirte a la hora de experimentar con la elección y colocación de tus espejos, más bien todo lo contrario; prueba nuevas decoraciones, tantea otras posibilidades, pero sabiendo cual es la mejor forma de hacerlo, evitándote los errores que ya se han cometido. Para esto simplemente debes conocer y estar atenta a lo que por lo general no son más que un par de señales de prohibido, y en todo caso aprender a detectarlas, nada más que eso. Las siguientes son unas de esas señales, los errores más comunes en la decoración con espejos.

Un espejo pequeño en una pared grande:

Uno de los desaciertos que más se repiten en la decoración con espejos es la de poner un espejo de pequeñas dimensiones en una pared amplia y por lo demás desnuda. Esta configuración, a todas luces inapropiada desde un punto de vista estético, trasmitirá una proporcionalidad claramente desequilibrada y conseguirá que el espejo se vea fuera de lugar lo que además puede traducirse en cierto desconcierto para nuestros invitados. Pese a todo tiene fácil arreglo, sin ir más lejos puedes crear una composición de espejos añadiendo más al que ya tienes, cambiarlo por uno más grande o sencillamente añadir otros elementos decorativos a la pared en cuestión.

Reflejo inapropiado:

Muchas veces ocurre que tenemos una pared donde nos gustaría colgar un espejo sin tener en cuenta lo que se reflejará en él, y cuando al fin lo colgamos, nos damos cuenta de que lo que refleja es una pared vacía, los peldaños de unas escaleras, una puerta o alguna otra cosa que no nos interesa realzar. En este sentido hay que recordar que siempre es importante, en la mediad de lo posible, que los espejos reflejen cosas interesantes con las que las miradas se puedan entretener o que queramos acentuar como puede ser, por ejemplo; un cuadro o lámina. Por otra parte tampoco es adecuado que un espejo incomode a posibles visitas y distraiga demasiado, por estas razones se recomienda no colocar espejos justo enfrente de la puerta del recibidor o a la altura y de frente a una silla o sillón.

Espejos a la atura inadecuada:

Hay algo peor que un espejo a la altura de la cintura! pues eso, ni muy alto ni muy bajo, como regla general siempre se puede tomar como referencia una altura media de la mirada de una persona, y si el lugar nos obliga a colocarlo algo elevado, por ejemplo; encima de una chimenea, el truco está en inclinarlo unos grados hacia el suelo, no siendo necesaria pero tampoco prohibida, la inclinación contraria; hacia arriba, para los que van intencionadamente a ras del suelo.

Espacio recargado de espejos:

Cuando se habla de espejos es habitual pensar en la famosa y luminosa sala de Versalles, toda ella repleta de grandes espejos, pero lo cierto es que un espacio así es poco funcional en un hogar, a no ser claro está; que se dedique a dar eventos periódicamente. Por lo general buscamos espacios acogedores, luminosos; pero no deslumbrante hasta la irritación, espaciosos, pero no al punto de sentirlos fríos, con lugares en los que mirarnos, pero no con un constante reflejo del que no podamos escapar. Por todo esto es conveniente no excederse en la decoración con espejos, un error que se suele cometer más a menudo de lo esperado. La norma, para una estancia de tamaño medio y con espejos de tamaño medio, es como máximo un par por estancia, a lo sumo tres si la estancia es amplia y los espejos de tamaño moderado. Con esto será más que suficiente para sacarles todo el partido a tus espejos y a la decoración de tu hogar.

Guía de compra de espejos dorados.

Como ya podemos intuir, una de las grandes elecciones a la hora de decorar un hogar, es la de los espejos. La importancia que supone un elemento decorativo tan central como éste radica no solo en sus aspectos más funcionales, como puede ser la necesidad de disponer de un lugar donde vernos o la de aportar luminosidad o una sensación de amplitud a los espacios, sino también en su dimensión estética u ornamental y su encaje en diferentes contextos y estilos. Desde luego, todos queremos que un espejo cumpla con su función, que se alinee con el resto de la decoración sin desentonar, pero que además satisfaga encarecidamente nuestro gusto y embellezca nuestro hogar, todo lo cual puede hacer que la elección adecuada del espejo; las veces, puede complicarse más de la cuenta al ser tantas las cosas a considerar. Aquí te proporcionamos una breve guía de compra para facilitarte la elección, y sobre todo; para que sepas que aspectos debes tener en cuenta en la compra de espejos.

Estilo:

Uno de los aspectos fundamentales que hay que considerar antes de ponerse a buscar un espejo es el del resultado decorativo que queremos lograr con su incorporación. En este punto hay dos posibilidades a tener en cuenta: 1) O bien buscar piezas que se alineen con el estilo que ya se tiene y se quiere conservar, con lo cual el espejo que se ha de buscar ha de encajar armoniosamente con la decoración, por ejemplo, un espejo redondo para un espacio de estilo moderno y joven, o bien 2) El de lograr un contraste o acento en la decoración con ánimo de transformarla y dotarla de una nueva personalidad, con lo cual; en este caso, el espejo a comprar ha de diferir en forma, color o acabado respecto al estilo que tenga el espacio, por ejemplo, un espejo dorado vintage en un baño moderno. Este primer paso te servirá para concretar la dirección de búsqueda inicial y reducir las opciones. En relación a los espejos dorados has de saber que pueden servirte para ambos cometidos.

Color:

Otra de las grandes cuestiones que es conveniente sopesar antes de elegir un espejo es la del color, y aquí como en la valoración del estilo; hay dos alternativas posibles, espejos de colores que armonicen con la decoración o que sirvan de contraste. Así por ejemplo, en un espacio en el que sobresalgan los colores neutros de la paleta de los ocres, y de un aspecto un tanto orgánico, los espejos de marco dorado funcionarán aportando brillo y consistencia pero sin perder la armonía cromática, y por el contrario, si los colores del espacio son muy definidos y con carácter, un espejo dorado brillante aportarán un punto de desemejanza y acento.

Tamaño:

También es muy importante atender al tamaño de los espejos en relación al espacio del que disponemos para colocarlos, e incluso; en relación al tamaño de otros elementos decorativos o muebles con los que vayan a compartir protagonismo. No sería bueno para nuestra decoración final el disponer las piezas decorativas de tal manera que estén en claro desequilibrio o disonancia en cuanto a la escala y la proporción. No por nada uno de los principios más básico del diseñó de interiores y la estética es el de la proporcionalidad y la consonancia. Por tanto, antes de ponerte a buscar tu próximo espejo considera de antemano las dimensiones de los muebles que lo acompañarán y el espacio del que dispones, y de forma accesoria; cuenta con que los espejos dorados suelen ser un tanto más focales y con un mayor protagonismo que otros de tonos menos llamativos, lo que también puede influir en el sentido de la proporción y el balance.

Estancia de colocación:

No por evidente hay que desatender o dejar de considerar el cuarto de nuestro hogar donde va ir colocado el espejo. Si bien hoy en día la decoración acepta casi cualquier opción, pudiéndose encontrar desde espejos que normalmente irían en los salones, como los de estilo vintage, colocados ahora en los baños, hasta espejos dorados grandes vistiendo sitios antes inimaginables como las terrazas, lo cierto es que no todos los espejos funcionan igual de bien en todas las estancias de la casa. Tener en cuanta la estancia en la que va ir colocado un espejo, por ejemplo, el recibidor, el dormitorio o el comedor, puede darnos cierta información para concretar la búsqueda inicial y ahorrarnos un poco de tiempo.

Nota final:

Como colofón de este apartado queremos darte el que sin duda será nuestro mejor consejo de compra de espejos y que en buena medida resume a todos los anteriores. Y es que cuando vayas a comprar un espejo ve con un plan de antemano, evita la compra compulsiva por muy bonito y rebajado que esté el espejo. Nadie quiere comprar un radiante y hermoso espejo y toparse con que no tiene donde ponerlo o que no encaja con la decoración. Por lo general cuando se fuerza la decoración el resultando final no siempre es el más apropiado.

Algunas curiosidades sobre espejos.

• Sabías que los primeros espejos de los que se tiene constancia estaban hechos de obsidiana pulida.
• La palabra espejo procede de un verbo latino que significa, «mirar» o «admirar».
• Era tal la obsesión por los espejos en tiempos de Luis XVI de Francia que él mismo llegó a poseer una colección de más de quinientos espejos.
• Se tiene constancia de que en el S. XVII un espejo de origen Veneciano llegó a tasarse hasta tres veces más caro que un retrato de Rafael.